Algo que no había hecho hasta ahora en el blog era hablar de mis movimientos de bigote, y éso que lo hago a menudo. Ayer, con excusa de mi cumpleaños, probé una izakaya en el Eixample de Barcelona de la que me habían hablado:
El nombre es ya toda una declaración de intenciones, ya que en Catalunya se utiliza Can para denominar ''la casa de'', y en este caso Can Kenji, ya deja claro que este japonés tiene un toque muy mediterráneo.
Y aquí va lo que compartimos mi compañero de palillos y una servidora, que somos como veréis de ''buen comer'' y en mi caso y sólo en mi caso, de mal fotografiar:
Ensalada de tartar de jurel con vinagreta de miso blanco
あじのタタキ風サラダ酢みそ和え
Tataki de atún con guacamole
まぐろのたたきとグアカモレ
Lengua de vaca y espárragos a la plancha
牛タン塩焼き
Albóndigas de shiitake y langostinos rebozados
椎茸とえびのあげだし
Surtido de nigiri
にぎり五貫 盛り合わせ
Tiramisú de té verde y Baileys
抹茶とベイリーズのティラミス
Helado de Azuki
小豆アイスクリーム
Maridado con un buen vino blanco: Tayaimgut / Penedès (Sauvignon blanc)
Fuimos los primeros en entrar al restaurante, aunque no tardaron en llegar más comensales, entre ellos japoneses, lo cual nos hizo imaginar que habíamos acertado con el lugar.
El tataki, las albóndigas y el tiramisú fueron más que un acierto, y nos hemos quedado con las ganas de probar la hamburguesa y el secreto ibérico.
El precio para una cena para dos ronda los 40-50€. En nuestro caso, el vino y el hambre canina que llevábamos los nigiris nos hicieron que subieran a los 60€, pero nada que ver con otros locales japoneses donde se paga mucho más por plato.
Sin duda, volveremos.
Sin duda, lo recomiendo.
Entra en la web de Can Kenji.
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